La novela To Kill a Mockingbird ( Matar a un ruiseñor ) y una producción cinematográfica del mismo drama, fueron hitos de gran resonancia cultural en Estados Unidos. Eran los años iniciales de la década de los 60 y la autora del libro fue Harper Lee, en su primera y única hasta entonces obra literaria.
Leerla era como trasladarse al sur del ayer, con todo el sabor amargo del esclavismo de entonces, pero todavía presente en las líneas sociales que separan a los de arriba de los de abajo. Harper Lee provenía de esa pequeña localidad –Maycomb, inspirada en Monroeville– de Alabama donde se desarrolla el drama en 1935.
La trama es un recuento imaginario de lo que hacía Lee en su infancia, cuando prevalecían los moquetes en los que ella, Scout, con nueve años, era campeona. En sus travesuras participaban su hermano Jem, de doce años, y Truman, un primo contemporáneo que compartía sus picardías. El elenco incluye a su padre, Atticus Finch, viudo aún joven, abogado e ícono de la moralidad que personifica Gregory Peck.
Aquí arranca la médula de la acción y no deseo privar al lector del inmenso placer de adentrarse en esta complicada madeja.
Con posterioridad a 1960, sabemos que el trío de los antiguos mosqueteros de alguna forma perduró. Cuando Capote realizó las entrevistas del principal acusado de los horrendos homicidios narrados en su obra In Cold Blood ( A sangre fría ), se sintió solo y en peligro en el ignoto lugar y le pidió a Harper Lee que lo acompañara, a lo que ella sin titubeos accedió. ¿Recuerda el lector que Truman era el primo del personaje principal en Matar a un ruiseñor"
El año pasado apareció otra novela de Harper Lee titulada Go Set a Watchman (Ve y pon un centinela) . La editorial HarperCollins decidió proseguir los planes de publicación. Sin embargo, si algo quedó claro es que el segundo manuscrito era originalmente el que correspondía al Ruiseñor, cuyo texto fue sometido a numerosos cambios y alteraciones editoriales. Ahora sale a la venta como una segunda novela de Harper Lee. Quedo a la espera de que alguien en su sano juicio aclare este misterio.
Harper Lee falleció el viernes. Tenía 89 años.